Los cachalotes son una de las criaturas más fascinantes y misteriosas del océano. Estos magníficos mamíferos son conocidos por su inmenso tamaño, su extraordinaria inteligencia y su increíble capacidad para bucear. Pero quizá uno de los aspectos más intrigantes del cachalote sea su dieta.
En este post nos adentraremos en el mundo submarino del cachalote, explorando los secretos de sus hábitos alimentarios y el impacto ecológico que tiene en los ecosistemas oceánicos. Acompáñenos a descubrir el fascinante mundo de la alimentación del Cachalote.
Adaptaciones corporales del cachalote
Los cachalotes están muy bien adaptados para vivir y cazar en los océanos más profundos del mundo. Su aspecto general consiste en un cuerpo aerodinámico y oscuro y una cabeza más o menos cuadrada. Su vista es ciertamente pobre en comparación con la de los humanos y otros animales, pero lo suplen gracias a una mandíbula y una cabeza perfectamente especializadas.
El melón, un órgano poderoso
La cabeza de los cachalotes contiene un gran tejido adiposo, llamado melón. Dentro de este órgano hay principalmente esperma de ballena, que es una sustancia cerosa y ha dado nombre al cachalote. Gracias al órgano del melón, los cachalotes son capaces de sortear obstáculos y encontrar alimento incluso en las oscuras profundidades del océano.
Un maxilar largo especializado
La mandíbula larga y estrecha de los cachalotes contribuye también a este estilo de vida especializado. En la mandíbula inferior se pueden encontrar hasta 52 dientes, mientras que los dientes de la mandíbula superior rara vez atraviesan las encías. Sin embargo, no se trata sólo de estas pequeñas cosas; ¡también todo el cuerpo está adaptado a unas capacidades de buceo impresionantes!
Buceo con cachalotes
Profundidad de inmersión
La inmersión más profunda jamás registrada de un cachalote ha sido de casi 3 km de profundidad. Los humanos sólo pueden alcanzar estas profundidades con cápsulas artificiales, como los submarinos. Aún no se sabe muy bien cómo soportan los cachalotes la enorme presión a la que están sometidos 📚. Artículos científicos similares
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Ciclo de inmersión de los cachalotes
Sin embargo, ya sabemos mucho sobre el ciclo de inmersión habitual de esta especie. Tras descansar en la superficie unos 10 minutos, los cachalotes espiran por última vez e inician la inmersión profunda mostrando su famosa aleta caudal. A continuación, se sumergen durante 40-60 minutos, aunque a veces más. La inmersión más larga registrada ha durado casi dos horas.
Y ahora te estarás preguntando ¿qué hacen estos tipos ahí abajo durante tanto tiempo?
Cachalotes Comportamiento de caza
Como suelen sumergirse al menos entre 600 y 800 metros, a los humanos nos resulta difícil observar lo que hacen en todo momento. Sin embargo, gracias a los micrófonos subacuáticos, también llamados hidrófonos, hemos obtenido información sorprendente sobre su comportamiento de caza. Gracias a su órgano melónico, los cachalotes pueden producir los sonidos más fuertes de la Tierra. Con clics de ecolocalización de hasta 233 decibelios son capaces de encontrar sus principales fuentes de alimento sin ver nada.
Además de escuchar esos chasquidos, hemos adquirido muchos conocimientos sobre sus fuentes de alimentación examinando el contenido estomacal de los ejemplares varados. Y se preguntarán, ¡pero este contenido difiere según el lugar donde la ballena haya pasado la mayor parte del tiempo!
Dieta del cachalote
En los distintos mares también hay distintos animales que pueden servir de presa a los cachalotes. Necesitan comer regularmente y en grandes cantidades. Para resistir el duro entorno, los cachalotes comen alrededor de 3% de su peso corporal cada día. Esto supone una tonelada de presas al día. Y eso es mucho. Pero, ¿qué cazan realmente en esas enormes cantidades?
Fuente principal de alimentos
Normalmente, los cachalotes se sumergen a gran profundidad, donde cazan predominantemente calamares de todos los tamaños. Hay indicios de que los calamares gigantes pueden ser la presa favorita de los cachalotes, aunque tampoco ignoran un pequeño bocado de calamar en medio. Los calamares gigantes pesan hasta una tonelada y pueden medir más de 12 metros, por lo que pueden alimentar mejor a un cachalote que los calamares de pequeño tamaño. Sin embargo, tampoco se rinden indefensos. Se pueden encontrar varios cachalotes con marcas alrededor de la cabeza, resultado de las luchas desesperadas de los calamares gigantes.
En general, los cachalotes comen entre 400 y 800 calamares al día, dependiendo del tamaño y del éxito de la caza. Como los calamares están compuestos principalmente de agua y tienen un bajo contenido energético, a veces las ballenas también los sustituyen por otras especies que pueden encontrar en las profundidades de los océanos.
Otras fuentes de alimentos
Así, además de calamares, se sabe que en algunas zonas los cachalotes cazan peces, que pueden constituir hasta la mitad de sus presas. Además, rayas, rayas y langostas se encuentran ocasionalmente en los estómagos de las ballenas. Y, curiosamente, ¡hasta los tiburones parecen estar en el menú de estos gigantes oceánicos!
La mayoría de las especies de ballenas no pueden alimentarse de tiburones porque no pueden tragárselos enteros. Las gargantas de otras especies de ballenas son demasiado finas para tragarse un tiburón entero, pero los cachalotes hacen una excepción en esto. Sus gargantas son mucho más anchas y, por tanto, son capaces de tragar tiburones. Algunos de los tiburones que se encuentran en los estómagos de los cachalotes son megabocados, dormilones, tiburones peregrinos, tintoreras e incluso marrajos.
Amenazas relacionadas con la dieta del cachalote
Aunque los cachalotes, debido a su estilo de vida de inmersión profunda, pueden evitar ampliamente la interferencia con los pescadores, siguen enfrentándose a bastantes amenazas y desafíos en relación con su dieta.
Enredo y arrastre
Las redes fantasma y los sedales siguen siendo una de las mayores amenazas para estos increíbles animales. Se enredan en redes flotantes y pueden nadar largas distancias arrastrando los aparejos atados. Fatiga, menor capacidad para alimentarse, menor éxito reproductivo, lesiones e incluso la muerte pueden ser el resultado de estos peligros flotantes.
Depredación
También se sabe que los cachalotes pescan con palangre de vez en cuando. Este comportamiento se denomina depredación y puede encontrarse sobre todo en zonas susceptibles de sobrepesca y de escasa vida marina. Esta especie de ballena altamente inteligente utiliza su larga mandíbula para provocar tensión en el sedal y así, sacudir al pez del anzuelo.
Las redes flotantes, los plásticos y otros residuos contaminantes también pueden confundirse ocasionalmente con presas y ser ingeridos por las ballenas. Diversos estudios han hallado diferentes trozos de basura en los estómagos de los cachalotes.
Ruido
Además, los humanos provocan muchos ruidos en los océanos. Los cachalotes dependen del sonido para alimentarse y comunicarse en el agua. Aunque son los animales más ruidosos, los ruidos producidos artificialmente pueden hacer que los mamíferos marinos cambien la frecuencia y amplitud de sus llamadas, lo que se traduce en un menor éxito de caza, una disminución del comportamiento de búsqueda de alimento, el desplazamiento de sus hábitats preferidos e incluso la pérdida de audición.
Contaminación y cambio climático
Además, el ser humano ha contribuido significativamente al cambio climático. Las temperaturas más altas están influyendo en el hábitat de las ballenas y con ello también alteran las fuentes potenciales de alimento en el océano.
Como puede ver, los humanos y su contaminación siguen siendo las mayores amenazas para los cachalotes. Afortunadamente, al menos la caza activa de ballenas ha terminado en la mayoría de los países del mundo, lo que ha dado lugar a un aumento de la población.
Comida para cachalotes y bomba para ballenas: por un medio ambiente sano
Por último, pero no por ello menos importante, el alimento de los cachalotes o, digamos, lo que queda después de la digestión, ¡sus heces son un importante factor de lucha contra el cambio climático!
Varios estudios han demostrado que la caca de las ballenas ayuda a estimular el crecimiento del fitoplancton, que a su vez crea un medio ambiente más limpio y sano al extraer carbono del aire. Este ciclo se denomina bombeo de ballenas. Se calcula que los cachalotes extraen del aire unas 400.000 toneladas de carbono al año.
Además, estas ballenas almacenan toneladas de carbono en los tejidos grasos de su cuerpo, que se extrae de la atmósfera durante varios años. Más tarde, cuando las ballenas mueren, normalmente se hunden en el suelo, lo que da lugar a un sumidero natural de carbono durante cientos y miles de años.
Conclusión
En conclusión, el cachalote es una criatura realmente extraordinaria, con una dieta tan compleja como diversa. Desde diminutos calamares hasta enormes calamares gigantes, estas ballenas son capaces de cazar una gran variedad de presas, que deben consumir en grandes cantidades para sostener sus enormes cuerpos.
Su dieta desempeña un papel crucial en el mantenimiento del delicado equilibrio de los ecosistemas oceánicos, y su comportamiento de caza ayuda a regular las poblaciones de sus presas. Gracias a un conocimiento más profundo de la dieta del cachalote podremos seguir desentrañando los misterios de estas increíbles criaturas y el papel que desempeñan en la salud de nuestros océanos.
Mientras seguimos explorando y estudiando el mundo natural, no olvidemos nunca la importancia de estos magníficos animales y el papel crucial que desempeñan en el mantenimiento de la salud de nuestro planeta.
Si desea saber más sobre estos valiosos y gentiles gigantes de las profundidades marinas, puede unirse a una de nuestras memorables excursiones de avistamiento de ballenas.
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